Problems and Purpose

“Life is really simple, but we insist on making it complicated.”

Confucius

"Flowers are not made by singing "Oh, how beautiful," and sitting in the shade."    
Rudyard Kipling

I want to continue with the theme of life not being complicated. Maybe it all got complicated when Adam and Eve disobeyed God in the Garden of Eden.  Maybe we make it complicated through selfishness, fear and laziness.  Who knows?  I just believe that it’s within my power to simplify my life.  In my last blog I listed 11 ways that I could simplify my life.

1.     I live a life that allows me to express my deepest loves in all areas.

2.     I live a life where money is my servant and not my master.

3.     I understand that problems are a part of life and accept them and then change them or allow them to remain.

4.     I stay consistent with my values.

5.     I communicate clearly.

6.     I don’t make assumptions.

7.     I commit to personal growth in whatever form that takes for me.

8.     I do work I love.

9.     I take care of my health.

10.  I leave a financial and spiritual legacy.

11.  I manage my possessions and/or decrease my consumption of them.

I’m not necessarily going to write about all of these but tonight I want to write  

about number 3.  I understand that problems are a part of life and accept them and then change them or allow them to remain. 

            Sometimes we get blindsided.  We get hit financially or spiritually or at home or on the job.  Sometimes someone we love breaks our heart or disappoints us.  Sometimes life doesn’t seem to be working out the way we want.  So here are two answers.  

First, the story isn’t over yet.  Until I am dead, I can keep writing my own story.  Yes, I may experience heartbreak or disappointment today, but tomorrow things could change.  Or something new could occur.  Today, for example, I had a painful setback.  Then when I got home I got a nice surprise.  The trick is to not trust either event.  The painful setback might reverse itself or turn into a new opportunity.  The nice surprise might turn out to become problematic.  One never knows. 

What I do know, in order to make life less complicated, is to not put too much faith in events, or to judge them as good or bad.  I also know is that, if I must judge events to be good or bad, it is better to measure them against my goals.  Does an event move me toward or away from my goal?  I think if it moves me toward my goal or keeps me from getting distracted, then it is “good.”  If an event moves me away from my goals, my Purpose, then it is “bad.”

The second thing to do when problems occur is to get your eyes back on your goals as quickly as possible.  I’ve mentioned the Enemy before.  The job of the Enemy is to destroy us.  If it can’t destroy us, then it will distract, dissuade, discourage or (try to) defeat us.  So we have to keep our goals in front of us.  Here are my goals to help remind me:

1.  I want a healthy relationship with God.

2.  I want to be peaceful and joyful as long and as often as I can.

3.  I want all my relationships to be mutually healthy and loving.

4.  I want to bless as many people as possible with my writing, speaking and teaching.

5.     I want to make enough money to be able to provide for my children and grandchildren.

6.      I want my children to be spiritually and emotionally healthy.

7.      I study and learn in order to grow intellectually, emotionally, professionally and spiritually.

There they are again.  A good friend rewrote my goals for me on 3x5 cards and then laminated them.  I keep them near me as a constant reminder.  That’s what I need:  constant reminders.  Because distraction is all the Enemy needs to keep me away from Purpose.

To keep life from being complicated (not without problems), I keep moving towards my goals.  It’s that simple.  It’s not easy necessarily, but it’s simple.  I move forward and toward my goals.  Every day.  Every moment I can.  I see no other way.  What else is there?  Everything else is just an impediment.

I have to Get Started and Keep Going.  And in this way, life is not complicated.

"La vida es muy simple, pero insistimos en que sea complicado".

Confucio

"Las flores no son hechas por cantar" Oh, qué bonito ", y sentado a la sombra."

 Rudyard Kipling

Quiero continuar con el tema de la vida no son complicadas. Tal vez todo se complicó cuando Adán y Eva desobedecieron a Dios en el Jardín del Edén. Tal vez sea complicado por el egoísmo, el miedo y la pereza. ¿Quién sabe? Sólo creo que es a mi alcance para simplificar mi vida. En mi último blog hice una lista de 11 maneras que podía simplificar mi vida.

1. Vivo una vida que me permite expresar mis más profundos amores en todas las áreas.

2. Yo vivo una vida donde el dinero es mi siervo, y no es mi maestro.

3. Yo entiendo que los problemas son parte de la vida y aceptarlos y luego cambiarlos o permitir que se quedara.

4. Me quedo coherente con mis valores.

5. Me comunico con claridad.

6. Yo no hago suposiciones.

7. Me comprometo con el crecimiento personal en cualquier forma que toma para mí.

8. Yo no trabajo me gusta.

9. Yo cuido de mi salud.

10. Os dejo un legado financiero y espiritual.

11. Puedo administrar mis bienes y / o reducir mi consumo de ellos.

No estoy necesariamente va a escribir sobre todo esto, pero esta noche quiero escribir

sobre número 3. Yo entiendo que los problemas son parte de la vida y aceptarlos y luego cambiarlos o permitir que se quedara.

A veces nos hacen caso omiso. Hemos golpeado financieramente o espiritualmente o en el hogar o en el trabajo. A veces, alguien a quien amamos nos rompe el corazón o decepciona nosotros. A veces la vida parece no estar funcionando de la manera que queremos. Así que aquí hay dos respuestas.

En primer lugar, la historia no ha terminado todavía. Hasta que me muera, yo puedo seguir escribiendo mi propia historia. Sí, puede experimentar angustia o la decepción de hoy, pero mañana las cosas podrían cambiar. O algo nuevo podría ocurrir. Hoy, por ejemplo, tuve un doloroso revés. Luego, cuando llegué a casa me dieron una sorpresa agradable. El truco está en no confiar en uno u otro caso. El revés doloroso podría revertirse o se convierten en una nueva oportunidad. La sorpresa agradable podría llegar a convertirse en un problema. Uno nunca sabe.

Lo que sí sé, con el fin de hacer la vida menos complicada, es no poner demasiada fe en los eventos, o para juzgar como bueno o malo. También sé es que, si he de juzgar los eventos a ser bueno o malo, es mejor para juzgarlos en contra de mis metas. ¿Un acontecimiento me mueve hacia o lejos de mi meta? Creo que si me mueve hacia mi meta o me mantiene de distraerse, es "bueno". Si un evento me aleja de mis metas, mi propósito, entonces es "malo".

La segunda cosa a hacer cuando surgen problemas es conseguir que sus ojos de nuevo en sus objetivos lo más rápidamente posible. He mencionado antes que el enemigo. El trabajo del enemigo es destruirnos. Si no puede destruirnos, entonces se va a distraer, disuadir o desalentar a (intentar) derrotarnos. Así que tenemos que mantener nuestros objetivos en frente de nosotros. Estas son mis metas para ayudar a recordar a mí:

1. Quiero tener una relación sana con Dios.

2. Quiero estar tranquilo y alegre, siempre y tan a menudo como pueda.

3. Quiero que todas mis relaciones sean mutuamente sana y amorosa.

4. Quiero bendecir a tantas como sea posible con mi forma de escribir, hablar y enseñar.

5. Quiero hacer el dinero suficiente para poder mantener a mis hijos y nietos.

6. Quiero que mis hijos sean sanos espiritualmente y emocionalmente.

7. Puedo estudiar y aprender para crecer intelectual, emocional, profesional y espiritualmente.

Allí están de nuevo. Un buen amigo volvió a escribir mis metas para mí en tarjetas de 3x5 y luego laminado ellos. Los tengo a mi lado como un recordatorio constante. Eso es lo que necesito: un recordatorio constante. Debido a que la distracción es todo lo que el Enemigo tiene que mantenerme lejos de Propósito.

Para que la vida sea complicada (no sin problemas), sigo avanzando hacia mis metas. Es así de simple. No es fácil necesariamente, pero es simple. Me muevo hacia adelante y hacia mis metas. Todos los días. Cada momento que pueda. No veo ninguna otra manera. ¿Qué más hay? Todo lo demás es un impedimento.

Tengo para empezar y seguir adelante. Y de esta manera, la vida no es complicado.